Práctica 2

En la entrada de hoy trataremos una infección muy común entre las personas, ya que solo puede afectar a estas, pero especialmente es típica entre los/as niños/as más pequeños/as de la casa. Nuestros protagonistas de hoy, son los piojos.

En primer lugar, debemos tener claro cómo actuar en caso de que el/la niño/a tenga piojos o tengamos sospechas de que puede llegar a tener. Lo más importante son los gestos de aleta, uno de los más frecuentes es el de rascarse la cabeza con mucho ímpetu durante un largo rato. O simplemente tiene quejas sobre el picor de cabeza. En estos casos lo más importante es hacer un primera búsqueda en el cuero cabelludo para comprobar si efectivamente hay piojos o liendres, después conviene avisar a las familias para que tomen medidas en el asunto.

En segundo lugar, para poder evitar el contagio tanto en la casa como en la escuela es de vital importancia tener claro que los piojos no saltan, es decir, necesitan tener contacto para poder pasar de una cabeza a otra. Por esta razón, siempre y cuando no se ponga la cabeza cerca de la persona que tiene piojos y no se compartan ciertos objetos con ella (gorros, peines, accesorios del pelo, almohadas...) no habría contagio. Todo esto se debe complementar con una buena higiene del cabello.

En tercer lugar, a la hora de restringir el paso para ir al colegio al alumnado, dependerá del tipo de los protocolos que cada colegio haya pactado. Hay escuelas que directamente les prohíben asistir hasta siete días después, en cambio, otras no les importan que sus alumnos/as vayan a clase. Bajo mi punto de vista, creo que es un asunto que se debería explicar con naturalidad en las reuniones familiares, en otras palabras, sin tabús. Ya que hay gente que piensa que tener piojos es porque no tienes una buena higiene y en muchas ocasiones les cuesta reconocer que sus hijos/as tienen ese parásito y lo único que consiguen es que se transmita a otros/as niños/as. También creo que los profesores/as deberían de dar una serie de pautas al principio del curso sobre cómo prevenir y sobre cómo actuar en caso de tener la infección.

Como conclusión, creo que es un tema muy complicado a la hora de acabar con él, ya que el colegio es el lugar idóneo para coger piojos, debido al gran contacto entre el alumnado. Por esta razón, debemos enseñar a nuestros/as hijos/as que no deben compartir ciertos objetos con los demás por motivos de salud y de vez en cuando deberíamos de hacerles una revisión para comprobar que no tienen piojos. Os adjunto una página donde explica muy bien como erradicarlos, a la vez que, explicar algunas curiosidades sobre los mismos. https://erradica.com/piojos/